NO LLORES MÁS MI GATITA DULCE…
No llores más mi gatita dulce…
No llores más mi gatita dulce,
hoy de ti aprecie lo que no vi una vez;
de tus ojos grandes fijos y alegres miraban,
a una mujer tan fértil como los sombríos;
después de cada cosecha, dabas esa sonrisa,
tan tenue a la expresión eufórica saltabas;
como aquellos cabellos guardaba aquel rostro,
tan tuyo a lo mas imaginado del lienzo;
mas tu voz alentaste a los sueños evocados...
No llores más mi gatita dulce,
que ha de venir mi aliento placentero;
de los tantos veces nunca pude verte antes,
que tanto me fui a volar a otros cielos;
que claman mi fugaz sentimiento,
elogiaste a lo más imprescindible de la faz;
el envés de las hojas me trae recuerdos,
sutileza la tuya del gozo de la gratitud;
mas tus manos sinceras estrechadas,
a mis hombros y la fiel expresión del llanto...
No llores más mi gatita dulce,
te recuerdo mas del ayer del ahora;
así que pasen una década y no cambias,
sigues siendo el ángel tierna de otros;
mas tu sonrisa se oculta como el sol al atardecer,
permanecías de lo importante que aglomeras;
mil paginas abiertas y no contadas antes,
más solo la magia del tiempo por vivir;
no te vayas entre la agonía y desespero,
sin saber donde podríamos estar luego;
al pasar de la vida plena radiante...
No llores más mi gatita dulce,
si ves el mar en solía y la arena;
solo alégrate como eres el sol al salir,
que fluyen las expresiones en un lapso;
latente entre los colores que pintan,
puede ser arco iris que se muestre;
y mil roedores se acerquen para estar,
tan presente en lo desconocido al vaivén;
el recojo de hojas dispersas hablan,
tanto fue mirar lo bohémico;
de aquel rincón inesperado a un aviso...
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Editado 12/12/2004